VENDRÁ LA
OTRA
La Noche es
una hermana de la Muerte,
que los
pesados párpados me baja;
sopla mi
mente, demasiado fuerte,
y me arroja
una sombra, una mortaja.
Al cuerpo
educa en el estarse inerte
que conviene
al tamaño de la caja,
y el alma,
que no deja que despierte,
en su
ciencia de olvido se aventaja.
Y una vez,
como estaba decidido,
hasta este
lecho en que he dormido tanto
vendrá la
otra, con el mismo olvido,
y cegará
también, pila de llanto,
los ojos que
hace mucho han aprendido
a cerrarse
sin lágrimas ni espanto.
Roberto Ledesma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario